Como una iniciativa del programa social de Fundautónoma y el Centro de Innovación y Emprendimiento conocido como Sinapsis UAO para apoyar a futuros emprendedores, nace la Escuela de Emprendimiento e Innovación como un proyecto de empleabilidad con enfoque social, que tiene como propósito brindar herramientas a las comunidades menos favorecidas para crear su propio negocio y con ello contribuir a su inserción en el mercado laboral.
Los territorios de influencia en los que se lleva a cabo este proyecto son las comunas 13, 14 y 15 de la ciudad de Cali, caracterizadas por ser zonas olvidadas y sin acceso a oportunidades. El primer ciclo comenzó con 15 integrantes dentro de los que destacaron por su participación mujeres jóvenes y madres cabeza de hogar, un importante aporte a la diversificación e igualdad de los emprendimientos locales.
“Este es un espacio para que las personas puedan conectarse con el emprendimiento, fortaleciendo el ejercicio de la paciencia, el compromiso y la perseverancia. Una oportunidad de perder el miedo a emprender, explorar nuevas ideas de negocio y articularse con el sistema de emprendimiento de la ciudad de Cali”, manifiesta Claudia Uribe Escobar, directora ejecutiva de Fundautónoma.
La escuela se implementó bajo una ruta de emprendimiento que brinda formación en competencias emprendedoras, talleres de coaching que fortalecen las aptitudes de los participantes a nivel personal, talleres de prototipado de negocios, ideación, finanzas básicas y rutas de vinculación con el ecosistema de emprendimiento a nivel local, pretendiendo encontrar beneficios y oportunidades para los emprendedores, y de esa forma conseguir su articulación con estos actores.
Adicionalmente, la escuela en su propósito de generar apoyo continuo en la materialización de sus ideas, ofrece mentorías posteriores al ciclo de formación, en las que voluntarios de distintas disciplinas, expertos en emprendimiento, se convierten en mentores de los emprendedores, trabajando con ellos para cristalizar sus ideas de negocio y garantizar su puesta en marcha, a fin de que lo aprendido trascienda fuera de las aulas.
Parte de la ruta de emprendimiento contempla la validación de sus ideas de negocio, se estudia la viabilidad de las mismas, se aterrizan y se complementan para dar estructura, orden y lograr aterrizarlas para su materialización. Durante todo el ciclo, se trabaja también en la búsqueda de soluciones a problemas locales con el objetivo de encontrar ideas de negocio para cada participante, sin embargo, algunos de ellos como es el caso del señor Alipio Lemus, llegan con sus proyectos de emprendimiento ya iniciados.
Lemus, quien lleva más de diez años trabajando para establecer y conformar de forma independiente en la ciudad de Cali su empresa dedicada al aseo, al momento de exponer su idea, se identificó que hacían falta herramientas financieras, de mercadeo, branding, entre otras, para convertirse en un negocio rentable y fructífero. Después del ciclo logró llevar su emprendimiento a otro nivel y convertirlo en lo que el deseaba, una empresa estructurada con oportunidades de éxito en el mercado.
Son innumerables los motivos que motivan la continuidad de la escuela de emprendimiento, la cual se proyecta seguir conectando a futuros emprendedores con nuevas oportunidades, brindándoles herramientas para su crecimiento personal y económico, potencializando la generación de empleo en la ciudad de Cali.
