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Con cero muertes violentas durante el viernes, los caleños se alistan para la celebración del Día de la Madre. Este año, a diferencia del 2018, no habrá ley seca.
Para garantizar la seguridad en la ciudad, si se tiene en cuenta que al festejo se suma el compromiso deportivo entre América de Cali y Millonarios, se dispondrá de 1.500 uniformados de la Policía, 800 de ellos se encargarán del Estadio Olímpico Pascual Guerrero.
También se han instalarán, junto con el con la secretaría de Movilidad, 15 puestos de control en las entradas, salidas y vías principales de la ciudad; en los corredores gastronómicos y en los centros comerciales. También habrá especial control en los establecimientos nocturnos del norte y sur de la ciudad.
El año pasado durante ese fin de semana se registraron 16 homicidios en Cali, nueve de esos casos ocurrieron el Día de la Madre y pese a la ley seca.
"Cali vivirá un dispositivo sin precedentes para prevenir la violencia durante la celebración del día de la madre", dijo el secretario de Seguridad, Andrés Villamizar.
Para reducir el impacto de la violencia que ha caracterizado esta celebración, habrá especial control por parte de la Policía Metropolitana en las comunas más afectadas por el homicidio, como las del Distrito de Aguablanca, al oriente de la ciudad, y la zona de ladera. Sectores donde harán presencia los grupos de Operaciones Especiales y del Escuadrón Móvil Antidisturbios.
