Las modelos de webcam en Colombia denunciaron abusos laborales y explotación sexual por parte de las plataformas donde producen contenido para la multimillonaria industria global del entretenimiento para adultos, según reveló un informe publicado este lunes por Human Rights Watch, que expuso las condiciones inhumanas a las que están sometidas las mujeres dedicadas esta labor en Bogotá, Medellín, Cali y Palmira.
Según el informe, las trabajadoras enfrentan jornadas laborales de hasta 18 horas sin descanso, coacciones para realizar actos sexuales no consensuados, condiciones antihigiénicas y un abuso sistemático por parte de los encargados de los estudios.
El documento de 175 páginas, titulado "'Aprendí a decir no': Abusos laborales y explotación sexual en los estudios de webcam colombianos", expuso una amplia investigación de 18 meses realizada en colaboración con la Liga de Salud Trans y la Corporación Calle 7 Colombia.
Durante este tiempo, los investigadores entrevistaron a 55 trabajadoras sexuales que compartieron sus experiencias en los estudios de webcam, donde las condiciones de trabajo son descritas como "deplorables".
Te puede interesar: Duró ocho años de monja y después se volvió webcam
Graves abusos laborales
Las modelos relataron cómo, en muchos casos, nunca recibieron información sobre las condiciones de servicio de las plataformas para las que trabajaban, dejándolas expuestas a abusos económicos y laborales.
De hecho, el informe reveló que un 49 de las 50 entrevistadas aseguró que nunca vio ni firmó las condiciones de servicio de las plataformas, lo que les permitió a los estudios manipular las cuentas y someterlas a explotación.
Las trabajadoras informaron que los estudios, que producen contenido para plataformas globales de webcams, se quedan con hasta el 70% de lo que los espectadores pagan por sus actuaciones.
A toda esta situación irregular se suma las condiciones insalubres de los estudios. De acuerdo a la publicación, los cubículos donde las modelos trabajan son pequeños, sin ventilación y en muchos casos infestados de chinches y cucarachas.
Además, las trabajadoras se ven obligadas a trabajar sin pausas para comer o ir al baño, y muchas reportaron desarrollar erupciones cutáneas y enfermedades debido a la falta de higiene.
Los testimonios
Una de las trabajadoras entrevistadas, una mujer transexual boliviana de 29 años que trabajaba en un estudio de Bogotá, contó que cuando solicitó poner fin a una actuación debido al dolor extremo, su encargado le indicó que si interrumpía, "le haría daño a la calificación", por lo que se vio forzada a continuar.
El testimonio de otra mujer denunció que fue presionada a realizar un acto con una botella de vidrio, con el riesgo de que se rompiera.
Además, las modelos expresaron su preocupación por el control de las cuentas de las plataformas, ya que los estudios las obligan a comenzar de cero si deciden dejar de trabajar para ellos, lo que las ata económicamente.
El informe también subrayó que muchas de las trabajadoras entrevistadas comenzaron a trabajar siendo menores de edad, debido a que los estudios eludieron las restricciones de edad de las plataformas "reciclando" cuentas de modelos adultas registradas anteriormente.
Según Human Rights Watch, la falta de control de las plataformas en cuanto a la verificación de la edad contribuye al riesgo de que niñas, niños y adolescentes sean parte de la industria.
Te puede interesar: Así funciona la 'universidad' de las modelos webcam en Cali
En cuanto a la explotación económica, el informe destacó que las trabajadoras no tienen acceso a información sobre sus salarios ni a control sobre sus horas de trabajo.
En muchos casos, los estudios crean las cuentas de las modelos en las plataformas sin que ellas tengan conocimiento o control. Este vacío de información y poder les impide asegurarse de recibir un pago justo por sus actuaciones y las expone a robos de salario y abusos de todo tipo.
Además, los encargados de los estudios recurren a amenazas de bloqueo de cuentas o reducción del tráfico para forzar a las trabajadoras a realizar largas jornadas sin comida o agua y a ejecutar actos sexuales que no han consentido.
Las políticas de las plataformas
La oenegé afincada en Washington también revisó las políticas de algunas de las plataformas más utilizadas en la industria, como BongaCams, Chaturbate, LiveJasmin y Stripchat.
Si bien han adoptado medidas contra la trata de personas y el abuso sexual infantil, el informe concluyó que las plataformas no han abordado adecuadamente los abusos laborales y la explotación sexual que ocurren dentro de los estudios que operan en sus cadenas de suministro.
Las respuestas de BongaCams, Chaturbate y Stripchat indicaron que estaban implementando medidas para prevenir estos abusos, pero negaron su responsabilidad directa sobre las condiciones laborales en los estudios. LiveJasmin, por su parte, no respondió a la solicitud de comentarios.
Erin Kilbride, investigadora de HRW y autora del informe, señaló que "las trabajadoras sexuales merecen las mismas protecciones laborales que todos los trabajadores, pero la industria multimillonaria de las webcams ha evitado en gran medida el escrutinio de los abusos en sus cadenas de suministro".
Kilbride instó a las plataformas a que adopten medidas más estrictas para proteger a las modelos y garantizar condiciones de trabajo seguras y dignas.
"Las plataformas tienen la responsabilidad de identificar, mitigar y prevenir los abusos de los derechos humanos por parte de los estudios, y deben llevar a cabo reformas acorde con las responsabilidades internacionales en materia de derechos humanos", agregó.
Human Rights Watch dejó claro que su interés no era el de criminalizar la industria, sino alentar para que se tomen medidas concretas que eliminen la explotación y garanticen condiciones laborales justas para las trabajadoras.
La organización colaborará con diversas entidades defensoras de los derechos de las trabajadoras sexuales para implementar un enfoque integral que permita acabar con la explotación laboral y sexual en la industria webcam.
Te puede interesar: Gobierno propone seguridad social para modelos webcam
Información de Colprensa.