El exgerente de la ESE Oriente, Óscar Ipia López, ha denunciado públicamente que fue declarado insubsistente en su cargo debido a que no favoreció los intereses políticos y económicos del alcalde Jorge Iván Ospina y su exasesor Harbey Hurtado.
Aunque la Alcaldía de Ospina alegó "ineficiencia administrativa" como motivo para su remoción, Ipia asegura que fue despedido porque se negó a servir a los intereses del alcalde y su exasesor.
Según relata el exgerente, llegó a dirigir la ESE Oriente, la red de salud más grande de Cali, como parte de un acuerdo en el que el alcalde Ospina le entregó la entidad como cuota política a su amigo Harbey Hurtado. Ipia afirma tener una amistad de más de 30 años con Hurtado y reconoce que fue gracias a esa relación que accedió al cargo de gerente. Sin embargo, lamenta que en ese ambiente político se vayan perdiendo principios y valores.
“Yo tenía una amistad con el señor Harbey Hurtado desde hace más de 30 años. Es una persona que aprecio y le tengo agradecimiento, pero que infortunadamente en estos escenarios se van perdiendo principios y valores, pero fue por esa amistad con Harbey que llego a gerenciar la ESE Oriente, que le fue entregada a él en un acuerdo con el Alcalde”, asegura Óscar Ipia.
Tanto el alcalde Ospina como Harbey Hurtado niegan que la ESE Oriente haya sido entregada como resultado de acuerdos políticos. Hurtado afirma que estuvo vinculado al gobierno Ospina como asesor de su despacho durante un año en 2020, pero niega tener familiares trabajando en la entidad. Aunque reconoce que recomendó a Ipia para el cargo de gerente debido a su amistad y conocimiento previo.
Primeras diferencia de Ipia y Ospina
Las diferencias entre el alcalde Ospina y el exgerente Ipia surgieron a raíz de la implementación del Plan de Desarrollo de la ESE Oriente. Ipia se basaba en la atención primaria en salud, pero Ospina argumentaba que esa área no generaba ingresos económicos. Ipia considera esta postura incoherente por parte de alguien que se presenta como médico y que estudió en Cuba, donde se enfatiza una formación salubrista.
La relación entre Ospina, Ipia y Hurtado se deterioró aún más con la llegada de la sobrina de Hurtado a trabajar en la Red de Salud del Oriente como supuesto apoyo a Ipia. Según relata el exgerente, la sobrina de Hurtado y otros allegados comenzaron a tomar el control de la ESE Oriente, asumiendo áreas como la parte contable y jurídica. Ipia afirma que intentó resistir y ejercer control sobre los contratos, pero se encontró con la oposición de estos nuevos actores.
“Yo estaba basado en la atención primaria en salud, pero el alcalde Ospina asegura que la atención primaria no da plata. Una posición incoherente para alguien que dice ser médico y que estudió en Cuba, donde hay una formación salubrista”, dijo el exfuncionario.
“Esa remodelación también la hizo el primo del Alcalde, y nadie ha dicho nada de eso"
Uno de los puntos de conflicto fueron los contratos relacionados con la remodelación de la clínica Unidos por la Vida. Según Ipia, la remodelación tuvo un costo de 10.000 millones de pesos, de los cuales 7.000 millones fueron aportados por la Secretaría de Salud y 3.000 millones por la ESE Oriente. Ipia asegura que se opuso a realizar ciertas compras con destinos específicos que consideraba inconvenientes, lo cual generó malestar en el alcalde y Hurtado.
“Esa remodelación también la hizo el primo del Alcalde, y nadie ha dicho nada de eso. Eso se lo tienen que sumar a todo el volumen de contratos que el Alcalde le ha entregado. Y los otros $7.000 millones venían con ‘destinación específica’. Ya decían a quién se le tenían que comprar los equipos y a quién comprarle los ventiladores, y yo no compré nada de eso. Se los pedí prestados a la Secretaría de Salud del Valle y luego los devolví”, explica Ipia.
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Dice que Ospina lo amenazó
La tensión entre Ipia y Ospina se intensificó cuando el exgerente se negó a renunciar a su cargo. Según relata Ipia, tanto Hurtado como Ospina lo amenazaron para que renunciara. Estas supuestas amenazas fueron negadas por Hurtado, quien afirma que no tuvo injerencia en la salida de Ipia. Ospina, por su parte, calificó como "loco" que se le pregunte sobre las amenazas.
“Primero fue una amenaza de Harbey, quien me cita a su empresa de buses y me dice: ‘Hermano, necesito que renuncie’. Le pregunté por qué y me dijo: ‘porque necesito el puesto, y si no, atenete a las consecuencias’. Le dije: ‘¿me está amenazando’? Y me dijo: ‘pues piense lo que le dé la gran p... gana’”, afirmó Ipia.
“Como me negué, me llama el alcalde Ospina y me dice que renuncie; me dice ‘hermano, yo soy una persona jodida; y si no renuncia atenete a las consecuencias’, lo mismo que me dijo Harbey”, puntualizó.
Lo sacaron por "insubsistente"
Finalmente, en abril pasado, Ipia fue declarado insubsistente en su cargo tras una evaluación de la junta directiva de la ESE Oriente. Según un documento enviado a la Personería, uno de los miembros de la junta pide investigar los hechos ocurridos ese día, ya que considera que no se realizó una auditoría adecuada y que el objetivo era justificar la salida del gerente.
Ipia denuncia que su destitución fue motivada por intereses electorales, ya que necesitaban la ESE Oriente para las elecciones. Afirma que durante la gestión del exgerente anterior, Javier Arévalo, las ligas de usuarios fueron presionadas para votar a favor de ciertos candidatos. Estas acusaciones ponen en evidencia una supuesta politización y presiones indebidas en la gestión de la entidad de salud.
La situación planteada por Óscar Ipia López es grave y merece una investigación imparcial para esclarecer los hechos.
