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En la mañana del 22 de mayo, el equipo periodístico de Q’hubo Bogotá sufrió una brutal agresión en el barrio Nueva Zelanda de Suba.
El reportero gráfico Gustavo Roa fue golpeado cuando se disponía a tomar las fotos de un hecho judicial. Un familiar del difunto, en vez de pedirle el favor de retirarse de la zona, comenzó a insultarlo y a quitarle la cámara.
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Él se negó a entregarla y salió corriendo, pero el sujeto comenzó a gritar que el profesional era un ladrón y entre varias personas le pegaron puños y patadas.
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Roa tuvo que ser trasladado a la Clínica Shaio para ser valorado y descartar un sangrado interno. Lo que más le preocupa a los médicos es que no solo presentó sangrado por la nariz sino también por los oídos, por lo que lo someterán a otros exámenes.
En el hecho, la periodista Catalina Puentes también fue agredida por gritarle a la comunidad que no le pegaran a su compañero, ya que no se trataba de un ladrón sino de un reportero gráfico.
Una mujer le gritó “sapa”, otro sujeto la escupió en la cara y enseguida la misma mujer le pegó en el rostro mientras le gritaba groserías.
En este video se puede ver al agresor, quien viste un pantalon amarillo y es acompañado por un Policía.
Los periodistas denunciaron que la Policía de Suba, en vez de mediar en la situación y velar por el orden público, no intervino en dicha gresca.
Hacemos pública esta información porque los ataques a la prensa cada día se vuelven más violentos y peligrosos para nuestros profesionales.