El 9 de junio de 1995, comenzó la caída del cartel de Cali con la captura de unos de sus exjefes, Gilberto Rodríguez Orejuela, en una lujosa casa del norte de la capital vallecaucana.
Hace 27 años cayó en una lujosa casa del norte de Cali, Gilberto Rodríguez Orejuela, unos de los narcos más buscados y de quien se confirmó su fallecimiento este miércoles 1 de junio en una cárcel de Estados Unidos.
LEA TAMBIÉN: Murió Gilberto Rodríguez Orejuela en una cárcel de Estados Unidos
Aquel 9 de junio de 1995, después de varias semanas de seguimientos, el bloque de búsqueda encontró a Gilberto en un escondite de madera, simulando un armario empotrado en el vestíbulo de una residencia de dos pisos en lujoso barrio de Santa Mónica, en el norte de Cali.
El momento de su captura
Rodríguez Orejuela, quien en ese entonces tenía 56 años de edad, era el jefe del cartel de Cali, el mayor exportador de cocaína del mundo.
Al momento de su captura estaba con su compañera sentimental, la ex reina de belleza Aura Rocío Restrepo.
“Él ingresó diciendo que nos habían caído. Fue a ponerse un pantalón y a esconderse. Había una caleta en un sitio muy pequeño detrás de un mueble de televisión donde lo ayudé a esconder”, relató la exreina.
La casa estaba vigilada por cuatro miembros de su seguridad y atendida por sus dos empleadas domésticas. A las 4:40 p.m. de la tarde, el comando que perseguía al "Ajedrecista" entró a la casa, llegó a la sala de televisión y ante el desmedido tamaño del mueble, no dudaron que allí se encontraba uno de los jefes del cartel de Cali.
"No me vayan a hacer nada. Tranquilos, muchachos, que yo soy un hombre de paz", aseguran que dijo el mayor de los hermanos Rodríguez Orejuela, conocido como El Ajedrecista.
"Éste es el principio del final del cartel de Cali", sentenció, dos horas después, desde el Palacio de Nariño en Bogotá, sede del Gobierno, el presidente Ernesto Samper.
Posteriormente, trasladaron a Gilberto en un avión desde Cali hacia Bogotá mientras que en las diferentes cadenas radiales y televisivas del país transmitían lo que se convirtió en un gran golpe a uno de los carteles más grandes del narcotráfico.