Una extraña desaparición de una niña de tan solo meses de nacida ha generado conmoción en Bogotá: la mamá dice que la tiró a un caño; su tía la busca desesperada.
Como Sara Sofía Galván, de 23 meses de edad, fue identificada la menor desaparecida el pasado 15 de enero en Bogotá. Al encontrar el paradero de la madre, la progenitora afirmó que la niña murió y la lanzó a un caño.
La Fiscalía investiga la aparente desaparición forzada de la menor, que estaba bajo la custodia de su tía, Xiomara Galván, porque su mamá no tenía recursos suficientes para mantenerla.
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En entrevista con Mañanas BLU, Galván explicó que hace dos meses la mamá de Sara Sofía le pidió dejarla ver, porque "ya estaba organizando su vida".
La tía aceptó y la dejó salir con la niña por unas horas. Así, un fin de semana de enero, la mujer le pidió quedarse con Sara, pero nunca más la regresó.
Según Galván, ella tenía la custodia de la infante, esto mientras su hermana se organizaba. Sin embargo, la madre de Xiomara se la llevó sin decirle nada a nadie.
Ella se lleva a la niña ese fin de semana y no vuelvo a tener contacto con ella. No me contesta el celular, expongo el caso al Bienestar, pero me dicen que bueno que la mamá es la que se llevó", narró Ximena.
Tras esto, la mujer llenó a Bogotá de carteles de la menor, medio por el cual una mujer se contactó con ella para darle detalles de la niña. Le dijo que su hermana era trabajadora sexual en un lugar llamado Patio Bonito, pero que ella ya no tenía a la niña.
Al conocer esto, Ximena decidió enfrentar a su hermana, quien sostuvo que Sara Sofía murió el 28 de enero.
Supuestamente, por miedo a las consecuencias, la mujer habría escondido y desaparecido el cuerpo de la bebé.
Yo enfrento a mi hermana, me voy hasta el sitio donde está, le pregunto por la niña y ella manifiesta lo mismo. Que le dieron comida, la pusieron a dormir, que cuando fueron a ver la niña ya no respiraba. Que cogieron a la niña, la envolvieron en una cobija, la metieron en una bolsa negra y la arrojaron al caño de Tunjuelito. No solamente a mí me lo dice, se lo dice al investigador del CTI", aseguró Galván.
Pero la tía de la menor tiene otra versión de lo que pudo haber ocurrido, su principal sospecha es que la mamá vendió a la pequeña.
Lo anterior, dijo la tía, debido a que la menor estaba sana cuando se la entregó a la mamá, por lo que "no pudo morir así como así", dijo.
"Al no ser que me la hayan golpeado o me la hayan violado; Dios permita que no sea así”, rogó la mujer.
"Hasta el momento no se ha hecho nada", denunció la mujer sobre la labor de las autoridades en su caso.
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