Pese a las súplicas, la medallista olímpica está a punto de ser desalojada de su casa

Decenas de personas realizaron un plantón en las afueras de la casa de medallista olímpica, Ingrit Valencia, por el desalojo que ordenó un juez.

Días anteriores, Valencia denunció haber sido víctima de un estafa. La mujer pagó a un hombre por una casa en Ibagué en la que vive hace más de un año, sin embargo, se habría tratado de una estafa pues el sujeto no era el propietario.

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Tras evaluar el caso, un juez determinó que Ingrit debía abandonar la casa en donde invirtió sus ahorros. Labor que se debía cumplir desde este lunes.

Razón por la que allegados de la deportista, se reunieron con pancartas y entre gritos a pedir que no fuera desalojada.

En un video difundido en redes se observa cuando en el predio hace presencia el juez quien se reuniría con el abogado de Valencia para intentar solucionar.

La estafa

Según contó la boxeadora, fue víctima de un robo pues le compró una casa que estaba en remate a un hombre que aseguró ser “el secuestre”.

“Efectivamente, yo fui al banco y sí, él aparecía como el secuestre de la casa. Le di 150 millones de pesos a este tipo, él me dio las llaves de la casa, pagó administración, luz y todo. Ya llevo casi un año viviendo ahí, y ahorita que llego de Tokio me encuentro con la noticia de que tengo una carta de desalojo, que el verdadero dueño está pidiendo la casa, y pues yo pagué por esa casa, hice un negocio con esta persona y no me quiere devolver el dinero”, contó.

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