Luego de acalorado debate, el Gobierno logró la aprobación de la reforma tributaria en el Senado.
El Gobierno Nacional logró en la noche de este miércoles, 2 de noviembre, un triunfo casi definitivo en su propósito de tener una reforma tributaria, al obtener ya la aprobación del proyecto por parte del Senado y quedó a la espera de que la Cámara de Representantes haga lo mismo en su sesión del jueves.
En el Senado hubo varias discusiones profundas por algunos artículos complejos, como por ejemplo el del impuesto a las iglesias que finalmente no quedó de la misma forma lo relacionado con los llamados artículos saludables.
Al respecto, el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, sostuvo que no se impondrá impuesto al pan en general, miel, leche, bocadillos, obleas y además, que las bebidas desde el primero de julio y alimentos desde el primero de septiembre para no afectar la canasta familiar y la inflación
Durante la larga sesión se negó la proposición de la eliminación de los impuestos de plásticos de un solo uso, también, la eliminación del artículo 17, de la no deducibilidad de las regalías, pero quedó igual que venía en la ponencia.
En lo relacionado con las iglesias las mismas no pagarán impuestos si realizan alguna actividad diferente a su propósito, como por ejemplo venta de libros.
Además, se aprobó que el sector minero-energético tendrá una sobretasa de renta en función del precio internacional de los últimos 10 años, mientras que el petróleo sería progresiva de 5, 10 y 15 por ciento; y en el del carbón, de 5 o 10 por ciento. Adicional a ello, no van a poder deducir las regalías.
Hubo una discusión larga sobre cárcel para evasores de impuestos, y en lo aprobado quedó que tendrán esa pena si lo hacen por tercer vez. Se incluyó un nuevo artículo en el que se especifica cómo quedaría el delito de omisión de activos o inclusión de pasivos y el de defraudación tributaria.
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Colprensa*
