Siloé, bajo el miedo y la muerte


Siloé, bajo el miedo y la muerte

En las últimas semanas el panorama de Siloé es desolador para sus habitantes que denuncian una violencia que parece no tener fin.

Muertos en las aceras, balaceras constantes, negocios cerrados, hombres armados a plena luz del día y un miedo terrible es lo que llevan viviendo las últimas semanas los habitantes de Siloé, Comuna 20 de Cali.

Ya que las disputas por el microtráfico que se viven en el sector se hacen cada vez más fuertes, pues se ha llegado al punto de ver hombres con fusiles patrullando las calles del sector.

Estas confrontaciones ya han dejado el saldo de ocho personas asesinadas, la mayoría de ellas, inocentes que estaban en el lugar equivocado. Las muertes se han registrado en diferentes sectores de los once barrios que conforman la ladera.

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El panorama de la violencia en el sector se confirma no solo por sus habitantes, sino también por el Observatorio de Seguridad de Cali; el cual da cuenta que entre enero y junio 16 de 2021 se han presentado 35 muertes violentas, 19 más que en igual período del 2020. Esto que arroja un crecimiento del 118%.

La mayoría de estos asesinatos estarían ligados al microtráfico y al ajuste de cuentas entre bandas que se disputan ese territorio de laberintos y callejones sin salidas.

A esas muertes deben añadirse las presentadas en el marco del paro durante choques entre el Esmad, manifestantes y civiles, y que los colectivos comunitarios piden que se esclarezcan pronto para llevar a los responsables ante la justicia.

Muertes recientes

Los asesinatos constantes en la zona ladera de la ciudad iniciaron el pasado 10 de junio, cuando John Gerardo Arenas, de 38 años, recibió un impacto por un disparo mientras se encontraba circulando en su vehículo por la glorieta de Siloé.

De acuerdo con declaraciones de habitantes, el hombre iba a recoger a su esposa cuando quedó en medio de los disturbios registrados en la zona.

El siguiente caso se registró el 14 de junio, cuando Elver Orlando Benavidez Orozco, de 39 años, fue asesinado en medio de su trabajo como vigilante en la estación del MÍO Cable Brisas de Mayo. Según cuentan los testigos, recibió un disparo por encapuchados que se encontraban en la zona.

La muerte volvió a acechar el 17 de junio, quitándole la vida a un joven de 21 años identificado como Juan Camilo Zorrilla. Lo asesinaron en la Carrera 51 con Calle 7 del barrio El Cortijo.

El 19 de junio la ‘parca’ llegó al sector de Siloé y Lleras Camargo, arrebatándole la vida a Camilo Larrahondo, de 18 años, y a Jorge Laureano Hidalgo, de 20 años.

Q’hubo también pudo conocer sobre el asesinato de dos primos en Siloé, identificados como Jhon Stiven López y Fabián Salamanca López.

“Stiven luchó tres días en un hospital, pues recibió varios impactos por arma de fuego en su estómago”, contaron habitantes del sector.

Cabe resaltar que estos homicidios no se reportaron en el boletín diario emitido por las autoridades.
El último caso de muerte violenta se registró este domingo en el barrio El Cortijo. Allí fue asesinado con arma de fuego un hombre de aproximadamente 30 años que aún se encuentra sin identificar.

Las bandas se apoderaron del sector

De acuerdo con las declaraciones dadas a El País por el director de la Fundación Crealo, Johny Rojas, al menos 14 pandillas protagonizan problemas de seguridad en la Comuna 20.

“Las balaceras son constantes, por acá pasan hombres armados diciendo que todos para la casa. Aunque no nos dicen la razón, sabemos que es porque iniciará un tiroteo. Ya los niños no pueden jugar en paz y los pequeños comerciantes abren sus puertas con miedo; además que la gente que se moviliza en moto a veces es abordada por hombres que los ponen abrir el maletín y los requisan, aunque no los roban eso causa temor”, relatan los habitantes.

“Los jóvenes ya no van en paz a entrenar; en estos días estaba ahí con mi hijo cuando llegaron a matar a un muchacho que estaba tratando de arreglar su vida. Los niños y el profesor estaban desesperados para ver dónde resguardarse. Esto del paro desató una ola de violencia que parece no tener fin, pues los CAI del sector se vandalizaron y no hay garantías de las autoridades”, dicen los vecinos de la zona.

Juan Carlos Moreno Marulanda, presidente de la Junta Administradora Local, JAL, de la Comuna 20, indica que “mediante el diálogo se han logrado superar los bloqueos, pero no el actuar delictivo; pues este se agravó al no contarse con fuerza pública. No hay confiabilidad en las garantías de las autoridades para proteger al comercio, a la comunidad y los jóvenes de la primera línea que están expuestos en las protestas”.

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