Miles de jóvenes universitarios deben esquivar la alta velocidad de las motos que están en los piques ilegales para poder ir a clases.
No para la problemática de los piques ilegales en Tuluá, pues los motociclistas se están desplazando hacia la variante que conduce a Buga, lugar en el que está ubicada la Universidad Central del Valle afectando a por lo menos 1.500 universitarios de la jornada nocturna.
"Están poniendo en riesgo la vida de la ciudadanía y ahora de los estudiantes, empleados y funcionarios de nuestra universidad pues en la salida de la Unidad Central del Valle del Cauca, UCEVA, hay una glorieta y ahí han aprovechado para realizar este tipo de actos. La franja nocturna finaliza hacia las 10:00 de la noche y esa es también la hora exacta en la que practican esos piques", dijo Raúl Villada, representante de los estudiantes.
LEA TAMBIÉN: Con machete en mano, taxista agredió verbalmente a otro conductor
Más allá del ruido y los accidentes, las personas también se quejan por el consumo desmedido de estupefacientes que ingresa hasta la universidad.
"No se han tomado cartas en el asunto y esta ciudadanía está necesitada antes que llegue a pasar un accidente fuerte o tengamos un hecho que lamentar. El alcalde es la autoridad competente para poner fin y regular la práctica", agregó Villada.
Advierten que han enviado derechos de petición e innumerables quejas a la Policía y la Alcaldía y no han prestado atención a esta problemática.