El picador colombiano Anderson Murillo falleció en la madrugada del 30 de junio en Madrid a los 73 años a causa de un cáncer de médula contra el que llevaba luchando los últimos meses, han confirmado a la agencia Efe fuentes próximas a este famoso varilarguero colombiano, que hizo historia en Madrid con una corrida de Victorino Martín.
Fue a las órdenes de Luis Francisco Esplá, el 9 de junio de 2001, con el toro Bodegón, cuando Murillo protagonizó un antológico tercio de varas que puso los tendidos de Las Ventas en pie y, no solo le obligaron a saludar con el castoreño, sino que después de su lidia, el maestro alicantino le sacó nuevamente para que le acompañara en una clamorosa e histórica vuelta al ruedo.
Este fue, sin duda, el episodio más relevante de una trayectoria brillante como picador, que tuvo también momentos importantes durante los años que estuvo en la cuadrilla de su compatriota César Rincón, compartiendo con él sus años de esplendor, aquellos que le pusieron en la cúspide del toreo, desde 1991, cuando abrió las cuatro Puertas Grandes en Madrid, hasta su primera retirada en 1999.
Además de acompañar a numerosos toreros hasta su retirada, a Murillo se le recordará también por ser uno de los picadores que actuó en la primera corrida de toros celebrada en China, concretamente en la ciudad de Shanghai, en el año 2004, un espectáculo en el que sufrió una aparatoso derribo, que, a la postre, fue lo que más impresionó al público oriental.
Esta es una de las últimas entrevistas que se le hizo.
Murillo, natural de la ciudad colombiana Montería, pertenecía a una familia de mucha tradición taurina, pues su hermano mayor, Melanio Murillo, fue uno de los picadores más importantes de Colombia y América en los años 70, y que llegó a formar parte de las cuadrillas de toreros tan importantes como Manuel Benítez "El Cordobés", Paco Camino, Pedrés o Pepe Cáceres.
También su hermano menor, Emerson Murillo, fue matador de toros, aunque su influencia en el mundo taurino fue mucho menor que la de sus dos hermanos varilargueros, ambos fallecidos a causa de esta terrible enfermedad.
¡Paz en su tumba!