Te puede interesar: Indígenas y Gobierno lograron acuerdo para desbloquear vía Panamericana
Una verdadera tragedia esta viviendo la familia de Julián Andrés Sáenz Velasco, un colombiano que llegó a Australia en septiembre de 2018 con una visa para estudiar inglés. Tres meses después terminó internado en un hospital con una condición de salud que aun no tiene nombre ni diagnóstico. En un mes tendrá que retornar a Colombia si no le extienden la visa, pero su madre teme por su vida.
Luego de dos meses de estadía en Australia después comenzó a sentirse muy mal; vomitaba todos los alimentos que ingería y no encontraba forma de recuperarse. Fue al médico pero se desmayó en la consulta y luego fue internado inmediatamente.
Lo admitieron en el hospital Austin de Melbourne en diciembre 2018 y tres meses más tarde sigue internado y su condición de salud continúa sin diagnóstico.
Según Concepción Velasco, madre del joven, "Julián esta mal". Ha sufrido infecciones, perdió 28 kilos y actualmente su tez ha adquirido un color amarillo. Además ha sido sometido a numerosos exámenes médicos y ha estado bajo la lupa de diversos especialistas, desde gastroenterólogos a urólogos, pero todavía no han identificado el nombre ni el origen de su condición.
Desde que aterrizó en Australia no se ha movido del lado de su hijo. Los compañeros de cuarto del joven, miembros de la comunidad colombiana en Melbourne y el personal del hospital le han prestado ayuda a la Sra. Velasco para enfrentar las demandas de la situación.
Julian tiene visa de estudiante que vence a mediados de mayo. Para permanecer legalmente en Australia debe solicitar una nueva visa, la 602 Medical Treatment Visa.
Su solicitud será considerada por el departamento de inmigración solamente si Julián demuestra que tiene la capacidad financiera de cubrir todos los costos médicos relacionados con su tratamiento, un requisito que es difícil de estimar cuando no hay un diagnóstico concluyente.
La Sra. Velasco y el grupo de amigos colombianos le han solicitado al hospital Austin que transfiera el registro e informes de salud de Julián a un grupo de médicos en Colombia para que sigan investigando su estado de salud en caso de que no pueda permanecer en Melbourne.
Mientras tanto, Julián y su madre se están quedando sin tiempo y dinero.