El Cali tuvo esta noche un bonito despertar y qué mejor momento que en la siempre reñida y competitiva Copa Libertadores.
Después del trago amargo que ha venido soportando en la Liga, Deportivo Cali se acordó de su grandeza y de la representación que lleva en este torneo internacional, y con una gran actitud, mucha personalidad, ráfagas de buen fútbol y dos impecables definiciones, tumbó a un grande del continente como Boca Juniors, al que le ganó 2-0 en Palmaseca por el Grupo E de la Libertadores.
Guillermo Burdisso, quien pasó precisamente por Boca y hermano de Nicolás, otro referente del cuadro xeneize hace unos años, fue el encargado de abrir el marcador con un impecable cabezazo a los 71 minutos.
John Vásquez, que llegó desde el banco, logró el tranquilizante 2-0 de zurda, a los 80 minutos, un verdadero premio para el Cali y para los casi 15 mil aficionados que fueron al estadio porque creyeron en su equipo.
En los primeros 45 minutos Deportivo Cali le jugó con personalidad a Boca, más allá de algunas intervenciones salvadoras del arquero Guillermo de Amores.
Pero los azucareros también pisaron con propiedad los predios de Agustín Rossi, generando algunas opciones que no tuvieron un final feliz por la ansiedad de los verdiblancos en el momento del remate final.
Sin embargo, el que primero avisó fue Boca con una llegada clara y peligrosa por la izquierda de Exequiel Zeballos que De Amores conjuró bien.
A los 13 minutos llegó la respuesta del Cali, pero de manera increíble la desperdició Yonny González. El arquero visitante se equivocó y el balón le quedó servido al delantero azucarero, pero en lugar de rematar de primera con el arco vacío, prefirió parar y acomodar el balón, permitiendo la reacción del zaguero Carlos Zambrano.
Cada que Boca atacaba, el Cali ripostaba. A los 39 de nuevo Exequiel Zeballos remató de derecha, De Amores salvó a medias, el balón le quedó servido a Darío Benedetto, quien sacó un derechazo, y una vez más el arquero uruguayo evitó la caída de su valla.
El local no se quedó atrás y se arrimó un par de veces terminando el partido, la primera con un saque de banda largo de Aldaír Gutiérrez que encontró al otro lateral, Christian Mafla, libre de marca, pero falló en el remate, y a los 48 fue Enrique Camargo quien no aprovechó para definir.
En el periodo complementario parecía que Boca tenía el control del balón y gozaba de mejores opciones, pero fue el Cali el que dio el primer golpe.
A los 71, tiro libre potente que cobró Kevin Velasco, Guillermo Burdisso se les adelantó a todos y metió un frentazo imparable para el 1-0.
Boca adelantó líneas y dejó espacios atrás. Eso lo aprovechó Velasco, quien metió un contragolpe por izquierda que definió John Vásquez de zurda para el 2-0.
Después el Cali le dio manejo al partido, más allá de algunas llegadas del visitante. Fue un triunfo claro y necesario. Fue el despertar del campeón, y lo hizo donde más se le necesitaba, en Copa Libertadores y ante un grande como Boca.