En la asamblea de socios que se llevó a cabo el jueves, se reveló que el pasivo del Deportivo Cali ronda los $86 mil millones, por lo que se están buscando soluciones urgentes para frenar el desangre económico.
Justamente por la alta deuda que tiene la institución con proveedores y trabajadores, el Deportivo Cali camina peligrosamente por el filo de la navaja, exponiéndose a sanciones fuertes.
Una de ellas es la posibilidad de perder el reconocimiento deportivo, de la que ya hay solicitudes ante el Ministerio de Deporte, y en caso de darse sacaría inmediatamente al cuadro azucarero de la Liga.
“En tres ocasiones hemos pedido ante el Ministerio del Deporte la suspensión del reconocimiento deportivo del Deportivo Cali, porque los mismos directivos del equipo han reconocido que están colgados 71 días con el tema de pago a los trabajadores”, le dijo a El País Carlos González Puche, director de la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales, Acolfutpro.
Explicó el dirigente que “La ley dice que el que tenga obligaciones vencidas con un plazo superior a los 60 días, previo al debido proceso, se le puede suspender el reconocimiento deportivo. Todo tiene un debido proceso, nosotros ponemos en conocimiento el incumplimiento y el Ministerio del Deporte pide documentos para verificar si esa situación es verdad. Eso lo hemos hecho con varios equipos y el Cúcuta fue uno de los que perdió el reconocimiento deportivo hace unos años”.
Dijo González que como lo han informado los mismos directivos del cuadro azucarero, si la deuda con los jugadores ronda los dos meses, “los jugadores con justa causa pueden pedir la terminación de sus contratos”.
Agregó el Director de Acolfutpro que el artículo 56 del Estatuto del Jugador habla que de no cumplirse los acuerdos firmados en los contratos, la Federación Colombiana de Fútbol deberá sancionar al club involucrado en el tema, situación que no ha pasado con el Deportivo Cali pese a la deuda que arrastra con el plantel.
“El estatuto del jugador en su artículo 56 dice en que los clubes deben cumplir con las obligaciones económicas contraídas con jugadores y otros clubes estipuladas en los contratos firmados; o sino podrán sancionarse a los clubes que se retrasen en los pagos más de 30 días. La ley es clara”, dice González.
En cuanto al tema de Daniel Mantilla, quien en varias ocasiones ha hecho saber su malestar por los incumplimientos, el Director de Acolfutpro expresó que “El jugador está demostrando que el club le debe y eso es algo legal en el momento de querer romper su contrato. Él está pidiendo que le paguen conforme a un reglamento que está en la Federación Colombiana de Fútbol”.
En manos del Ministerio del Deporte está la situación del Deportivo Cali. El País conoció que la directiva se comprometió a cancelar el lunes parte de lo adeudado a jugadores y personal administrativo, para evitar que las cosas sean más difíciles.
Deportivo Cali realizó el jueves su asamblea en la que buscaba soluciones a la problemática. Varias propuestas se lanzaron, siendo la más importante la recomendación de un grupo asesor de activar el Decreto Ley 560 como medida de choque para frenar el desangre económico.
De acuerdo con Supersociedades, “es la creación de un ecosistema de recuperación empresarial, amplio e incluyente, que facilita la preservación de la empresa y el empleo, mediante una serie de herramientas de salvamento y acuerdos de reorganización”.
En las próximas semanas se hará una nueva asamblea para seguir buscando fórmulas que permitan salir de la dura situación.
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