No hay duda de que las patologías que afectan los vasos sanguíneos del cuerpo y el corazón, constituyen una pandemia que no solo cobra la vida de miles de personas en Colombia, sino de Latinoamérica y de todo el mundo.
Entre dichas patologías, conocidas como enfermedades cardiovasculares, están la hipertensión arterial (presión alta), la diabetes mellitus, la dislipidemia o enfermedad de colesterol alto, la arterioesclerosis (obstrucción de las arterias del corazón), así como las arritmias y fallas cardiacas (disfunción del corazón para bombear o contraerse correctamente).
“Esta es una epidemia que venimos enfrentado desde hace más de 30 años”, expresa el doctor Juan Esteban Gómez Mesa, Jefe del Servicio de Cardiología de la Fundación Valle del Lili, al recordar que solo durante el año 2020 la mortalidad por enfermedad cardiovascular fue superada por el Covid-19, pero ya en el 2021 volvió a situarse como la principal causa de muerte a nivel global.
En el caso de Colombia, según el documento Indicadores Básicos de Salud 2021, del Ministerio de Salud, durante el 2019 se registraron 151.481 muertes a causa de algún padecimiento del sistema circulatorio.
Particularmente, en Cali, por encima del resto de ciudades del país, “existe una mayor incidencia de estas complicaciones, lo cual tiene que ver, en parte, con el gran porcentaje de población afrodescendiente, quienes padecen más problemas asociados a hipertensión arterial y enfermedades coronarias”, indica el doctor Gómez.
“En personas jóvenes también se presentan patologías cardiacas, que en su mayoría son arritmias. Pero estas enfermedades del corazón se dan más en adultos que no se cuidan, ni van a chequeos médicos a tiempo”.
Juan Esteban Gómez Mesa
Jefe del Servicio de Cardiología
Fundación Valle del Lili
Un problema en aumento
Lo preocupante es que se trata de una pandemia en la que no se vislumbra un final, sino que por el contrario cada vez se incrementa, pese a que muchos de los factores de riesgo se pueden modificar, como es el caso del sobrepeso, el sedentarismo, la alimentación, el tabaquismo, el consumo de alcohol y de sustancias tóxicas, como también la aparición de colesterol y triglicéridos. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), si se realizaran cambios en los hábitos cotidianos, se podría evitar que un 50% de los casos asociados a problemas cardiacos terminen en infartos, los cuales ocurren cuando hay daño y muerte del músculo cardiaco.
El doctor Gómez, también cardiólogo e internista de la Fundación Valle del Lili, señala que “el incremento de muertes tiene muchísimo que ver con estilos de vida no saludables, porque cada vez tenemos más acceso a comidas rápidas que no son de la mejor calidad, a bebidas carbonatadas con alto contenido de azúcar y al consumo de cigarrillo y alcohol”.
Según el reporte anual que publica el Ministerio de Salud, actualmente en la población menor de 5 años se presenta un porcentaje muy alto de sobrepeso, al igual que en menores entre los 5 y los 14 años. Así mismo, describe que existe una mayor permanencia frente a las pantallas de televisión y otros dispositivos tecnológicos, lo que predispone al sedentarismo y la obesidad, que se asocian a un mayor deterioro de la circulación a nivel arterial.
A todo ello se suma que en Colombia ha aumentado la expectativa de vida (80 años para mujeres y 74 para hombres), “y en ese orden de ideas, viviendo más años, hay mayor desgaste del corazón y probabilidad de desarrollar alguna enfermedad cardiovascular”, asegura el cardiólogo.
La prevalencia de las enfermedades cardiovasculares hace que instituciones de alta complejidad como la Fundación Valle del Lili, promuevan campañas de sensibilización, que buscan generar más conciencia sobre los cuidados del órgano vital. Máxime, en el marco de la celebración del Día Mundial del Corazón, que se conmemora cada 29 de septiembre (ver recuadro).
Cabe recordar que la Fundación Valle del Lili cuenta con un Servicio de Cardiología para toda la comunidad, que dispone de especialistas con todos los recursos diagnósticos y tecnológicos, para detectar a tiempo y tratar las diferentes enfermedades cardiovasculares.
Por qué cuidar el corazón
La principal razón para evitar que el corazón se enferme, en opinión del doctor Gómez Mesa, “es porque es uno de los órganos más importantes para el funcionamiento del cuerpo humano y para ello trabaja como una motobomba: recibe sangre oxigenada del pulmón y la conduce al resto del organismo”.
De hecho, en un minuto, un corazón sano puede hacer circular de tres a cinco litros de sangre, y latir entre 60 y 100 veces. Y, en un día, late un promedio de 100 mil veces.
Respecto a las recomendaciones para la buena salud de este músculo, el Jefe del Servicio de Cardiología de la Fundación Valle del Lili, precisa que desde las diferentes sociedades científicas vienen trabajando para enseñar a la comunidad que cuando hay dolor en el pecho, se debe consultar de inmediato con el médico.
Igualmente, después de los 40 años es importante hacerse un chequeo cardiovascular, para determinar si existe algún riesgo. Pero, si la persona tiene antecedentes de padres o hermanos con estas enfermedades, debe buscar valoración médica especializada antes de los 40 años, más urgente si ya tiene condiciones de riesgo asociadas a lesiones del corazón, como obesidad y tabaquismo, entre otros.
Respecto a la alimentación, el doctor sugiere llevar dietas sanas y responsables, acompañadas de actividad física, con asesoría de un médico deportólogo, pues algunas personas padecen enfermedades del sistema circulatorio o metabólicas que se deben revisar previamente.
Con relación a los síntomas que pueden indicar una enfermedad cardiaca, los más importantes son: dolor en el pecho, falta de aire cuando la persona está en reposo o cuando realiza alguna actividad física, desmayos o cuando se duerme una parte del cuerpo por más de una hora.
Finalmente, el doctor Juan Esteban Gómez Mesa hace un llamado a la comunidad para que, de la misma manera en que a diario se esmera por su apariencia física, también aprenda a cuidar este órgano vital, sin el cual la vida no sería posible.
Otros factores de riesgo cardiovascular
Además de la herencia (antecedentes familiares) y la genética, las enfermedades cardiovasculares ya mencionadas y los estilos de vida no saludables, existen otras condiciones que influyen para que una persona padezca una patología cardiaca. Es el caso del género, debido a la protección hormonal que tienen las mujeres y se pierde cuando llegan a la menopausia, igualando el mismo riesgo que tienen los hombres de padecer estas condiciones.
También influye el estrés, la ansiedad y la depresión, porque debido a múltiples cambios fisiológicos y metabólicos, se puede alterar la circulación, asociándose con aumento de la presión y, por tanto, complicaciones cardiacas.
No obstante, la mayoría de los pacientes no atienden las recomendaciones en el estilo de vida, en el control de los factores de riesgo o en las metas terapéuticas de prevención, por lo que la enfermedad cardiovascular sigue siendo un reto importante para la población general, las políticas gubernamentales y para los profesionales de la salud.
Actividades de la Fundación Valle del Lili
Con ocasión del Día Mundial del Corazón, que se celebra este 29 de septiembre, la Fundación Valle del Lili realizará diversas actividades, entre las que figura una exposición de corazones en tercera dimensión (3D), desde el lunes 26 hasta el viernes 30.
Anatomías de un Latido, se denomina esta exposición, que estará abierta o a todo el público en la entrada de la Sede Principal de la Institución.
Asimismo, el jueves 29 de septiembre, a las 3:00 p.m., se hará una transmisión en vivo sobre cómo cuidar el corazón, a través de las páginas de Facebook e Instagram (@fundacionvalledelili), en la que especialistas en cardiología y personal de enfermería compartirán consejos y resolverán dudas.
Otra de las actividades programadas durante esta celebración, es un tamizaje cardiovascular, al que tendrán acceso los empleados de la Institución, el jueves 29 de septiembre durante todo el día.