El cuerpo de Antonio Guillermo duró 14 horas tirado en el lugar donde sus agresores lo mataron; las autoridades no llegaban a hacer el levantamiento porque era una zona de alto riesgo.
Para la familia de Antonio Guillermo Dorado este fin de semana fue un total calvario, pues tras el vil asesinato del hombre, de 40 años, por robarlo, tuvieron que esperar casi 14 horas para que su cadáver que estaba tirado, fuera recogido por las autoridades.
De acuerdo con la familia Dorado, Guillermo, a quien le gustaba que le dijeran Bambam, falleció a eso de las 7:00 p.m. del viernes.
Sin embargo, tras la demora recogieron su cadáver a las 10:40 a.m. del sábado y apenas ayer les entregaron el cuerpo.
Nos decían que no podían llegar porque supuestamente es una zona roja, pero allí estuvimos nosotros acompañándolo toda la noche y parte de la mañana, hasta que se lo llevaron en el platón de una camioneta de la Policía.
manifestó una familiar del hoy occiso.
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Del hecho de sangre se conoció que se produjo en medio del forcejeo de la víctima, con los presuntos delincuentes que lo despojaron de sus pertenencias.
‘Bambam’ era un hombre pacífico, sus hermanas cuentan que le gustaba verlas disgustadas, para luego hacerlas reír.
Además, este padre, que deja una hija de 12 años y a su esposa, era un dedicado trabajador de la construcción que quería salir adelante.
“Él era una recocha, le gustaba que lo llamaran por su apodo, hasta los sobrinos le decían así, era como un niño más y se la pasaba jugando con agua y tierra con ellos”, manifestó una de sus hermanas.
“Le quedó pendiente una rumba conmigo, a él le encantaba salir a ‘faroliar’ y era amante de la Selección Colombia”, añadió otra allegada.
Esta familia cuenta que nunca imaginaron tener que vivir esta experiencia, pues comentan que llamaron a todas las autoridades y que nadie les quiso dar la mano, pero confían en que pronto darán con los responsables de esta dolorosa tragedia, que hoy enluta al Kilómetro 30.
