Un menor de apenas 15 años de edad fue alcanzado por una bala perdida que de inmediato apagó sus sueños.
A Roberth Fernando Cajas Bermeo, de 15 años, una bala perdida le apagó los sueños y la sonrisa radiante que lo caracterizaba entre los habitantes del barrio Manuela Beltrán.
El joven fue impactado por un proyectil a la altura de su cabeza cuando se encontraba en un supermercado comprando los productos para el almuerzo.
De acuerdo con las autoridades, el triste hecho se presentó este sábado a las 10:00 de la mañana sobre la Calle 112 con Carrera 26E.
“Todo empezó en medio de un robo, ya que un hombre que estaba en una bicicleta le quería robar el celular a un vecino, pero debido a que este se resistió el delincuente le disparó; la víctima logró esquivar el impacto, el cual lastimosamente recibió Roberth, pues justo cuando él se disponía a salir del supermercado la bala le cayó a él. El joven que estaba siendo robado al ver esto salió corriendo detrás del delincuente, pero no lo alcanzó”, le relataron testigos del hecho a Q’hubo.
Los cuales manifestaron que fueron los encargados de darle aviso a los familiares del menor, pues el joven era conocido por su amabilidad y responsabilidad.
“Roberth salió al supermercado alrededor de las 9:40 a.m. a comprar los alimentos para el almuerzo, pero después de 20 minutos llegó un joven tocando la puerta para decirme que mi hermano estaba herido, así que yo salí corriendo al supermercado y mi hermanito estaba ahí tirado con un tiro en la frente. Fue desgarrador ver como su vida y sus sueños se le apagaban por una bala perdida. En medio de mi desespero lo alcé y lo llevé al hospital, pero él ya estaba muerto”, relató con dolor la hermana del hoy occiso.
Sobre Roberth
El joven se encontraba a puertas de graduarse de 11, pues actualmente cursaba decimo grado en el colegio Los Ángeles de Dios, donde sus profesores y compañeros de estudio se han visto afectados por el trágico hecho.
"Roberth era uno de los jóvenes que en este barrio no se dejaron llevar por el mal camino de la delincuencia, era un joven luchador y apasionado por trabajar y querer cumplir sus sueños. Además, era demasiado colaborador y amable. Me duele mucho que le haya pasado esto y le oro a Dios porque el responsable de este hecho caiga ante las autoridades”, dijo una vecina del menor.
“Era un amigo excepcional que siempre estaba dispuesto a ayudar, su muerte me ha dejado conmocionada pues me llena de tristeza saber que mi amigo no podrá cumplir sus sueños y metas por culpa de la delincuencia que se vive en este sector. Le pedimos justicia a las autoridades, para que la muerte de Roberth no quede en la impunidad”, manifestó una amiga.