Estados Unidos sigue inmerso en una de las olas de protestas más grandes que vivió en los últimos años. La muerte de un hombre negro a manos de un policía despertó la ira de la población que sigue pidiendo justicia.
Miles de soldados patrullaban este domingo las principales ciudades de Estados Unidos, tras cinco noches consecutivas de protestas contra el racismo y la brutalidad policial; una ira que el presidente Donald Trump atribuye a radicales de izquierda.
La rabia desatada tras la muerte en Minneapolis de un hombre negro, George Floyd, a manos de un policía blanco, provocó disturbios, saqueos e incendios.
En la noche del sábado la violencia también ganó las calles en Nueva York, Filadelfia, Dallas, Las Vegas, Seattle, Des Moines, Memphis, Los Ángeles, Atlanta, Miami, Portland, Chicago, e incluso la capital Washington. Los gobernadores de los estados involucrados convocaron a la Guardia Nacional y, en algunos, decretaron un toque de queda.
Sigue leyendo: Tik Tok es la red social favorita en cuarentena
Hubo rutas cortadas, autos y comercios incendiados. Mientras tanto, las fuerzas del orden, desplegadas en gran número, respondieron con gas lacrimógeno y en algunos casos, con balas de goma.
Asimismo, unos 5.000 soldados de la Guardia Nacional están desplegados en 15 estados y en Washington. Dos mil más estaban listos para intervenir de ser necesario, informó el domingo este cuerpo.
Según Tim Walz, el gobernador de Minnesota, epicentro de las manifestaciones, los responsables de la caótica situación podrían ser anarquistas, supremacistas blancos o narcotraficantes.
Sigue leyendo: Un artista alemán toca su piano todo el fin de semana para llamar la atención sobre la crisis de su gremio
Por su parte, Trump, señalado de enardecer la violencia por calificar a los manifestantes en Twitter como "matones", prometió poner fin a "la violencia colectiva".
Además, responsabilizó de los desmanes a la "izquierda radical" y al grupo antifascista Antifa.
¿Qué pasó?
De Seattle a Nueva York, decenas de miles de manifestantes reclamaron cargos más duros contra los policías implicados en el deceso de George Floyd. Su muerte ocurrió después de que el agente Derek Chauvin lo mantuviera de bruces contra el suelo durante casi nueve minutos, arrodillado sobre su cuello.
Sigue viendo: Una niña argelina murió tras ser torturada en un supuesto exorcismo
Ante las protestas, el viernes, Chauvin fue inculpado por asesinato en tercer grado. Esto después de haber sido despedido junto con otros tres policías involucrados en la detención. Pero eso no alcanzó para contener la indignación.
La muerte de Floyd se ha convertido en el último símbolo de la violencia policial contra los ciudadanos negros. Esto ha provocado la mayor ola de protestas de los últimos años en Estados Unidos.
De esta forma, los manifestantes corearon consignas como "Black Lives Matter" (Las vidas negras importan) y "No puedo respirar", las palabras de Floyd antes de morir.
Indignación mundial
La muerte de George no solo indignó a Estados Unidos. Miles de manifestantes se tomaron las calles de Toronto, en Canadá, y Londres, Inglaterra, para manifestarse ante la brutalidad policial.
Por su parte, el deporte mundial también se ha hecho sentir ante estas protestas. Primero fue kylian Mbappé, quien se sumó a la protesta desde Twitter, escribiendo el hashtag con el que se pide justicia por Floyd.
Te puede interesar: Convirtieron una volqueta en una piscina en plena cuarentena
Después, en la jornada de la Bundesliga de este fin de semana, tres jugadores rindieron homenaje al hombre muerto.
El sábado inició los homenajes el joven centrocampista del Schalke Weston McKennie. El estadounidense lució un brazalete con el mensaje 'Justice for George'.
El gesto más espectacular lo protagonizó el joven delantero del Borussia Mönchengladbach Marcus Thuram. El frances celebró uno de los goles de la victoria 4-1 de su equipo frente al Unión Berlín poniendo una rodilla en tierra, con la cabeza gacha.
Posteriormente se sumó la joven estrella inglesa del Borussia Dortmund Jadon Sancho. Tras marcar el primero de sus tres goles en la victoria frente al Paderborn (6-1), se quitó la camiseta para mostrar otra con el mensaje 'Justice for George Floyd'.
No dejes de ver: ¿Qué pasará con la prima de junio? Estas son algunas propuestas