Un 'veterano' de la Primera Guerra Mundial reposa en el Museo Fénix, en el corregimiento de Rozo, en Palmira, se trata de uno de los primeros carros que llegaron a Colombia. El Mack de 1916, es un camión Americano, que luego de llevar tropas y suministros a Alemania fue traído en uso de buen 'retiro', donde trabajó por muchos años en una empresa harinera.
Este transformes 'vintage', con sus ruedas de casi 300 kilos, rodaron por las primeras calles de Bogotá, donde en ese entonces eran trochas.
“Este carro tenía un rin en hierro, rodeado con una banda de caucho maciza que se vulcanizaba allí mismo, cuando se deterioraba. Era un carro que se movía a unos 60 kilómetros por hora, con 40 caballos de fuerza y lo que más lo caracterizaba era su transmisión de cadenas”, dijo Jaime Roldán, coleccionista.
Este clásico que tiene 102 años hoy se encuentra como en su flor de la juventud, nuevo y funcional, pues aún conserva la misma 'percha' verde militar con la que combatió. “El carro ha sido restaurado durante varios años y funciona como el primer día que salió al mercado. El tanque del combustible está ubicado debajo del asiento del piloto y le caben unos 20 galones de gasolina. En esos tiempos no se pensaba en la seguridad del conductor solo en que se moviera”, argumentó el coleccionista.
El veterano de guerra tiene sus pisos y parabrisas originales, construidos por artesanos en madera. “Como todos los carros al principio eran encendidos con manivela, este la tiene en la parte delantera, pero encenderlo era todo un arte, porque al no saber coger la manivela luego de que despegara el motor se podía quedar con un brazo roto por su fuerza”, explicó Roldán.
Este modelo tuvo muchas funciones, “En Estados Unidos lo utilizaron como carro de bomberos, en el área agrícola y como transporte de maquinaria, de allí salió su primero sobrenombre 'El Bulldog', pues los solados británicos decían que tenia la tenacidad Bulldog”.
Hoy este fogueado carro reposa en el Museo Fénix, donde su forma distinta llama la atención a cualquier persona, pues su color verde y espectacular forma lo hace parecer a un insecto mecánico.
