Un cura protagonizó un hecho de maltrato animal en medio de una celebración religiosa en su parroquia. Esta persona le pegó una patada a un perrito y lo sacó de la iglesia.
Un sinfín de comentarios negativos y críticas desató la reacción de un sacerdote católico en el momento en que un perrito entró a la iglesia.
Todo ocurrió cuando el hombre le pegó una patada al canino que se acercó al altar y olfateó. La actitud que mostró el párroco fue indiferente, al igual que la de los feligreses que estaban en el lugar, pues en la grabación no se vio que ninguna persona se acercara al animal.
No obstante, fue por redes sociales por donde se enviaron varios comentarios como "tanto predicar la bondad para actuar con tanta crueldad hacia un animal indefenso que solo busca refugio del sufrimiento en las calles", "un inhumano como este no debería ser sacerdote" y "el supuesto hombre de Dios", entre otros.
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