¿La lactancia materna afecta la salud bucal de los niños?

Son muchos los mitos que hay alrededor de la lactancia materna y la salud oral de los niños. Aquí se despejan algunas dudas.

Del 1 al 7 de agosto se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna que en 2022 tiene como lema: “Impulsemos la Lactancia Materna: Apoyando y Educando”.

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Conscientes de la importancia de esta práctica, desde la Academia Colombiana de Odontología Pediátrica, se está apoyando la lactancia, reconociendo el aporte para la generación de una salud bucal positiva en los niños y niñas.

“La lactancia materna, además de crear ese gran vínculo afectivo entre la madre y el bebé, es el mejor ejercicio que hace el bebé para desarrollar su cara y boca, entrenando los músculos, la lengua, los labios para cumplir efectivamente con funciones vitales como la respiración y la deglución de igual manera que las futuras acciones como la masticación, la deglución, el habla y el desarrollo de sus maxilares; además de los beneficios inmunológicos y nutricionales, que impactan al ser humano en todas sus etapas de crecimiento” comenta la Dra. Adriana De la Torre, ex presidente y miembro de la Academia Colombiana de Odontología Pediátrica – ACOP.

Ventajas de la lactancia materna para la salud bucal de los niños:

• Disminución de riesgo de maloclusiones en la dentición de niños y niñas.
• Fortalece el tono muscular
• Favorece el adecuado desarrollo de los maxilares y la correcta posición de los dientes en la arcada.

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¿Debe interrumpir la lactancia materna cuando nacen los dientes del bebé?

El nacimiento de los primeros dientes del bebé no debe ser un obstáculo para continuar con la lactancia materna ya que la misma se realiza a través de la succión y presión que ejerce la lengua, y los dientes no deben lastimar o incomodar, ni al bebé ni a su madre.

¿A qué edad se debe iniciar la higiene bucal del bebé?

Es aconsejable que los padres realicen la higiene bucal de su bebé a partir de los 3 meses de edad con una gasa húmeda con movimiento circulares, y desde el nacimiento del primer diente (entre los 6 a 10 meses) y en adelante, con cepillos de cerdas suaves, de tamaño adecuado para su edad y el tamaño de la arcada, utilizando cremas dentales que contengan concentraciones adecuadas de flúor (el Odontopediatra determinará el plan individualizado para cada paciente) para dar la protección necesaria disminuyendo el riesgo de aparición y desarrollo de caries dental.

“Tanto la higiene bucal como la consulta odontológica deben ser parte de los controles de salud general, de crecimiento y desarrollo del bebé. Será en la consulta donde el profesional de la salud bucal puede instruir a la madre y cuidadores con recomendaciones y enseñanzas importantes, detectar señales de alerta o cambios que puedan indicar la presencia de patología, caries, enfermedades en las encías e incluso problemas en la mordida y presencia de hábitos que puedan afectar su crecimiento normal, de esta manera intervenir a tiempo estableciendo las bases para una óptima salud bucal y buenos hábitos” finaliza la Dra. De la Torre como llamado a la prevención desde ACOP.